Murcia.
todo me parece tan lejos. ayer, el siglo pasado, el año pasado. lejos todo.
me prometí reformar el blog e instalar el Radio.Blog, promesas incumplidas.
no sólo eso sino que me he ido dejando un ordenador roto y otro desconectado. mierda de Semana Santa y festivos de cerrar.
la entrevista del lunes fue muy bien. sin embargo, no fui El Seleccionado. mierda otra vez.
y aquí estoy, en unas vacaciones raras, sin saber muy bien qué pinto. me he traído dos libros a medio leer, y no sólo eso, sino que en el aeropuerto añadí otro a la lista de libros pendientes (no me pude resistir). sigo gastando de manera insensata.
esta noche hemos cenado Telepizzas, y creo que a una isla desierta me llevaría una Carbonara + Formaggio (bien mitad y mitad, o bien una de cada). no me canso de sus sabores grasientos y voluptuosos.
así como la gente no se cansa de decirme que estoy hermoso (como sinónimo de "gordo" o "rollizo"). hecho este que me parece singular y curioso, incluso podría parecerme divertido si no viviésemos en una sociedad de culto a lo flaco. me pregunto si a toda esta gente le gustará verme cumplir... no sé, digamos ¿50 años? y ver que efectivamente padezco de todas los males que me vaticinan. o ¿seré yo el que sobreviva más sano que una manzana y todos estén jodidos por las dietas y el tabaco? (lo que me parece insólito es que 110 kg para un varón de 1m80 se trate reiteradamente como una enfermedad).
Marianne Faithfull está demoledora en los créditos de La Cité Des Enfants Perdus: "I can't give you all my dreams / nor the life I live / you and I know what friendship means / that's all we got to give / who will take your dreams away?". y sigue así. sin desperdicio.
el año que viene quiero guardar todas las pautas para conmemorar la muerte de Jesucristo; quiero leer la Biblia y quiero meditar en los hechos. y quiero pasar por esta semana sin la sensación desagradable de que es una semana más. y no quiero perder las costumbres que me reconfortan. y quiero salir de esta desgana. quiero, quiero, quiero. mío, mío, mío. yo, yo, yo. parezco uno de esos egocéntricos críos malcriados de fin de siglo (de fin del siglo 20).
Escrito por Cordero a las 28 de Marzo 2005 a las 01:49 AM